LA LEY DEL ESPEJO

 

No estamos solos en este espacio terrenal y en esta vida; como seres sociales necesitamos de ese contacto social con los demás.  Todas las personas con quienes compartimos nos están mostrando todo aquello que necesitamos mejorar y cambiar. En ese ejercicio de las relaciones sociales que comenzamos desde muy temprano en nuestra vida, existe una ley que no debemos dejar pasar desapercibida, ya que conocerla y ponerla en práctica nos va a permitir una mejor calidad de vida emocional y social.  Esta es "LA LEY DEL ESPEJO".

 

 La ley del espejo dice:

El mundo exterior actúa como un espejo, reflejando tanto nuestra luz, como nuestra sombra, siendo un retrato de nuestro mundo interior"

Todo lo que sucede a tu alrededor y te hace daño, eso mismo es la causa de lo que sucede en ti, es como un espejo de tu interior.

 

Esta ley consta de cuatro matices que nos permiten conocerla mejor: 

 

1. Todo lo que te molesta, enoja, irrita o quieres cambiar del otro, está dentro de ti. Cada que criticas a alguien por un motivo equis, algo de eso que tanto criticas, lo  deseas o tal vez lo necesites  cambiar en ti. Lo que pasa es que aún no lo has reconocido.

 

2. Cuando alguien te critica por algún motivo y te duele o te molesta,  algo tiene que ver contigo o es que algo está reprimido en ti. Enfócate en el dolor que sientes, porque tú no puedes controlar algo de lo que te dicen,  pero sí puedes analizar y corregir el "por qué" te duele eso. Es decir, identificar  la causa de ese dolor y algo tienes que cambiar en ti porque aún no lo has resuelto. 

 

3. Cada que te critican, juzgan y quieren cambiarte en algún aspecto, pero esto no te afecta, entonces es algo que el otro debe cambiar y lo ve reflejado en ti. Entonces eso es algo que quien te juzga debe analizar hacia adentro  para cambiar en él, porque puede ser el motivo de alguna dificultad en su personalidad y debe identificarlo y empezarlo a trabajar. 

 

4. Lo que amo del otro, lo que admiro con intensidad y pasión, también está dentro de mí, es decir que soy poseedor de eso que admiro, aunque aun no me haya dado cuenta.  Cada que tú admiras algo de alguien y se lo dices, eso habla mucho de ti. Aquel que sabe admirar, agradecer y observar admirado las bondades de los otros,  expone algo de su interior de manera positiva. 

 

 

En conclusión, cada que vivas, sientas o experimentes un disgusto, enfado o incomodidad por la acción de alguien; busca en tu interior,  ¿qué será lo que debes trabajar o reforzar en ti? Tal vez en ese análisis encuentres tus luces y tus sombras que se despiertan por las acciones de otros y hacen que se activen tus propios desequilibrios. 

 

Para aplicar la ley del espejo puedes empezar escribiendo una lista de las cosas que te molestan de las demás personas, con rigurosidad y detalle, después confronta esa lista con las cosas buenas o que admiras de esas personas. Paso seguido es confrontar esa lista de dos columnas contra tu propia lista. (Tus luces y sombras) Es decir, establece un espejo de lo que has extraído de los otros,  con lo que es tu radiografía personal. Inmediatamente podrás reconocer muchas cosas en las cuales debas trabajar, como también aprenderás a reconocer tu responsabilidad en los conflictos y aquellos rasgos de personalidad que no has dejado fluir en tu propia identidad personal.